El duelo y la pérdida son experiencias de tránsito inevitables en nuestras vidas. Son, por supuesto, momentos de profunda tristeza y puntos de inflexión y transformación.
Ninguna persona va a poder evitar transitar estas situaciones y, sin embargo, no estamos en absoluto preparados para ello. Afrontar estos desafíos de manera saludable no siempre es fácil pero es recomendable y necesario para el proceso de cicatrización y el bienestar emocional a largo plazo.
Contenidos
Toggle¿Cómo enfrentar el duelo y la pérdida de manera constructiva?
Desde el Método SOMA, estamos convencidos de que un duelo bien ejecutado es una de las experiencias que más nos hacen evolucionar hacia mejores versiones de nosotros mismos. Pero esto no va a ocurrir de manera automática, por el simple hecho de sufrir una pérdida importante en la vida.
Necesitamos, ante el trauma y el dolor de la pérdida, disponer de una hoja de ruta que nos lleve, de forma amable pero consistente, por tránsito del Duelo, hacia la transformación. De lo contrario, habremos pagado el precio, en forma de dolor, sin permitir que la experiencia nos aporte su verdadero valor. 👍
A continuación listamos los pasos que consideramos imprescindibles para transitar el duelo:
Reconocer y Permitir las Emociones
Reconoce y permite fluir la gama completa de emociones que tienes contenida. Desde la tristeza y la ira hasta la confusión y la nostalgia, cada sentimiento es una parte válida del proceso. Suprimir estas emociones puede obstaculizar la curación, mientras que permitir su expresión facilita la liberación emocional y el avance hacia la aceptación.
Buscar Apoyo Social
El aislamiento puede agravar el dolor del duelo. Buscar el apoyo de amigos, familiares o incluso profesionales de la salud puede proporcionar consuelo y comprensión. Compartir experiencias con aquellos que han atravesado situaciones similares puede ser especialmente beneficioso, creando conexiones que ayudan a mitigar el sentimiento de soledad.
Aceptar la Singularidad del Duelo
Cada persona vive el duelo de manera única, y no hay un marco de tiempo establecido para superarlo. Acepta la singularidad del propio proceso y evita comparaciones con otros.
La paciencia y la comprensión de que la curación es un camino individual permiten avanzar a un ritmo más natural.
Honrar y Recordar
Honrar y recordar a la persona o la situación perdida es una parte inherente al proceso de duelo. Establecer rituales, crear homenajes personales o simplemente recordar momentos significativos contribuye a mantener viva la memoria. La conexión continua con el legado emocional de lo que se perdió puede ser reconfortante y empoderadora.
Buscar Sentido y Significado
Preguntarse sobre el aprendizaje, el crecimiento personal o las nuevas perspectivas adquiridas puede abrir la puerta a una comprensión más profunda y a la construcción de un significado valioso a partir de la experiencia y puede ayudar a darle un propósito al proceso de duelo.
Explorar Prácticas de Autocuidado
El duelo puede ser física y emocionalmente agotador. Incorporar prácticas de autocuidado, como el ejercicio, la meditación, el descanso adecuado y una nutrición equilibrada, contribuye a fortalecer la resistencia emocional y física. El cuidado personal juega un papel fundamental en el proceso de recuperación.
Buscar Asesoramiento Profesional
En casos de duelo más complejo o abrumador siempre es recomendable buscar el asesoramiento de un profesional. A veces la pérdida es tan traumática, que nos quedamos sin herramientas para acceder tan siquiera al duelo. En esos casos hace sentido contar con el apoyo de un profesional.
Conclusión
En el Método SOMA vemos el tránsito por el duelo y la pérdida como un proceso personal, único y transformador.
Reconocer las emociones, aceptar la singularidad de la experiencia y buscar apoyo o asesoramiento profesional cuando sea necesario son las claves para atravesar este viaje de manera constructiva, saliendo del otro lado como un ser mejorado y mucho más sabio.
Esto te puede interesar > Transforma tu Mente: Descubriendo el Poder Oculto de la Neuroplasticidad
No confundamos duelo con depresión. Si las emociones bajas duran demasiado tiempo, si la vida se ha teñido de gris y no hay ni siquiera breves momentos de alegría, ha llegado el momento de buscar ayuda.